¿Otra de amor?

Si, por una simple razón: escribir me hace sentir mejor. Se que parece absurdo, pero en realidad no publico mis sentimientos porque piense que lees mi blog, pero mi diario ha dejado de consolarme. Se que no lo lees y seguramente no llegarás a leerlo nunca, ni sabrás que estas palabras te las he escrito a ti. Pero ya todo me empieza a dar igual. Me has ayudado a no ser tímido, a no ocultarme detrás de un simple libro lleno de mis paranoias y pensamientos.

Ha pasado un día más, otro día en el que no has salido de mi cabeza, de mis pensamientos y mis preocupaciones. No has salido ni siquiera durante las dos horas y media en las que he estado haciendo el examen. No te culpo, ya se que soy yo el problemático, el que tiene que solucionar el problema.

Y es que no puedo seguir así. No puedo seguir enamorado de ti, tengo que buscar una solución para que esto acabe. Me gustaría que acabase felizmente: que tu leyeses el blog y te dieses cuenta de que estas lineas te las he escrito a ti con toda mi sinceridad y amor. Y que luego quedásemos en el parque, debajo de un árbol bajo el sol y que me besases. Bale, se que eso sólo pasaría en un cuento de hadas, lo sé (jejejeje). Pero bromas fuera, seamos realistas:

Una de las opciones es que te lo diga y que te haga pasar un mal rato. Y la otra es dejar pasar el tiempo, haciéndome daño a mi mismo hasta que no pueda ocultar mis sentimientos y te des cuenta de lo que pasa (de cualquier manera). En las dos formas me dirías que no, también lo sé.

Ahora me he quedado en blanco, no sé lo que decir. Me gustaría que todo volviese a ser cómo antes: ser yo mismo cuando hablo contigo y no ser un falso fingiendo que sigues siendo sólo mi amiga.