O más bien consecuente con los vientos que soplan. Después de meditarlo mucho, no voy a arriesgarme a hipotecar mi verano. Los exámenes me obligan a dejar a un lado mi vida social durante tres semanas. Este fin de semana no he ido a hacer snow y tampoco podré ir a Bilbo. Diez exámenes en catorce días exigen un determinado tiempo de estudio al día. Y eso sin sumar algunos curros que me quedan pendientes.
Quiero creer que el 13 de febrero va a llegar rápido, que hasta entonces no nevará y en carnavales lloverá (así no sufriré tanto). Espero que este sacrificio valga la pena.
Quiero creer que el 13 de febrero va a llegar rápido, que hasta entonces no nevará y en carnavales lloverá (así no sufriré tanto). Espero que este sacrificio valga la pena.
3 comentarios:
Animo txo.
Pues yo espero que empieze a nevar, ya, ya, ya! que se prepare Astún, Candanchu o Formi a velocidad del rayo...porque a partir del 13 vamos a ir pisando fuerte!ya lo creo! aaaiixx...yo, si fuese de snow, no me acercaría mucho a la menda!:P
Y espero que en carnavales haga un tiempo 10. Que los que se disfracen de turistas, puedan ir en chancletas.
Que disfruten los que puedan (podamos...txarrenak pasauta egongo dira ta!)...además, creo, que a aveces, de la envidia más sana, también se aprende y se valora mas lo que "perdemos"...
Animo gorka, gora bihotzak!
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10 exámenes en 14 días??!! Tengo yo 4 en 15 y estoy agobiadísima...Mucha suerte amigo "visible" :)
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